Este sábado, 25 días después de su desaparición, la angustia y la incertidumbre sobre el paradero de Nayelly García continúan sin resolverse. La joven de 15 años, quien supuestamente “escapó” con su padrastro, Juan Ignacio Apaza, el 23 de octubre, se mantiene desaparecida, y el misterio que rodea su paradero parece tornarse cada vez más incierto y angustiante. A medida que el tiempo avanza y las horas suman, lo único claro es que las fuerzas de seguridad, la familia y la comunidad entera están movilizadas en una carrera contrarreloj por encontrarla.
A casi un mes de la desaparición, ya han pasado más de 600 horas desde que Nayelly se subió a una camioneta en Pico Truncado, Santa Cruz, sin dejar rastro. Aunque existen varias pistas, la información sigue siendo contradictoria, y los giros en la investigación mantienen tanto a las autoridades como a los familiares en vilo. Lo que parecía ser una desaparición fugaz ha dado paso a un caso complejo con una red de incertidumbres y dudas que inquieta a toda la comunidad.
La investigación sobre el paradero de Nayelly está centrada ahora en el norte argentino, más específicamente en la provincia de Salta, donde las autoridades creen que Apaza podría tener algún tipo de apoyo familiar. En las últimas horas, un hallazgo clave ha elevado las tensiones: una camioneta que, según las autoridades, corresponde a la que Apaza usaba antes de la desaparición. La camioneta, una Ford EcoSport blanca, fue encontrada cerca del río Bermejo, en la frontera con Bolivia, sin las chapas patentes colocadas y abandonada en un lugar aislado.
Según el comisario Elbio Ramírez, vocero de la Policía de Santa Cruz, el hallazgo de la camioneta ha sido crucial para comprender el rumbo de la investigación. En diálogo con LU12 AM680, Ramírez detalló: “La camioneta fue vista en videos de Pico Truncado, y es la misma que Apaza adquirió días antes de la desaparición. Sabemos que es una Ford EcoSport blanca, un vehículo que, hasta entonces, no había sido relacionado con la búsqueda”.
La conexión con la frontera boliviana ha generado nuevas interrogantes sobre si Apaza y Nayelly habrían cruzado la línea limítrofe, lo que incrementa la urgencia de la operación. La investigación ahora se orienta también a determinar si, en efecto, la adolescente y su padrastro lograron escapar hacia otro país. Aunque las hipótesis no se han confirmado, la información generada por las autoridades en las últimas horas hace prever que la vida de Nayelly podría estar en riesgo(L.O.A)