Estados Unidos reforzó en las últimas horas el bloqueo petrolero impuesto a Venezuela tras interceptar un tercer buque en aguas internacionales cercanas al país sudamericano, de acuerdo con reportes difundidos este sábado por medios del exterior.
Bloomberg News informó que el petrolero Bella 1, con bandera panameña y bajo sanciones de Washington, quedó bajo control de personal estadounidense cuando avanzaba para cargar crudo venezolano. El hecho se suma a otras maniobras registradas durante la semana.
La jornada previa, la Guardia Costera de ese país abordó el superpetrolero Centuries, también panameño, cerca de Venezuela. Aunque no integra el listado oficial de sanciones, la Casa Blanca aseguró que trasladaba petróleo extraído por la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA).
La vocera presidencial Anna Kelly afirmó en la plataforma X que el cargamento tenía origen en la petrolera estatal sancionada. El 10 de diciembre, fuerzas de EE.UU. incautaron otro buque, el Skipper, y anunciaron la retención del crudo que transportaba.
El presidente Donald Trump ordenó el 16 de diciembre un “bloqueo total y completo” para impedir la entrada y salida de embarcaciones sancionadas desde puertos venezolanos. Además, su Gobierno designó a la administración del presidente Nicolás Maduro como “organización terrorista extranjera”.
Datos del portal de monitoreo marítimo TankerTrackers.com indican que decenas de buques alcanzados por sanciones permanecen fondeados o en tránsito por aguas del Caribe vinculadas a rutas venezolanas.
El Gobierno venezolano condenó la interceptación de buques petroleros, calificándola como un acto de “piratería” y denunciando que Washington busca profundizar el bloqueo económico e impulsar cambios políticos en la región. Las exportaciones de crudo representan la principal fuente de divisas para dicho país y conforman un pilar clave de su estructura económica.

