Las Fuerzas Armadas de Rusia atacaron en la madrugada de este domingo infraestructuras del complejo militar-industrial de Ucrania y de la red de transporte al servicio del Ejército de este país, acción a gran escala en que se emplearon la aviación operativa y táctica, centenares de drones de combate, misiles de precisión y artillería.
De acuerdo con el Ministerio de Defensa ruso, fueron destruidos lugares de montaje, almacenamiento y lanzamiento de drones de largo alcance, usualmente empleados por el régimen de Kiev para perpetrar ataques contra sitios civiles y la infraestructura energética rusa.
La cartera añadió que fueron impactados, además, depósitos de armas y equipo militar, aeródromos militares en el centro, sur y este de Ucrania, dos radares de defensa antiaérea, así como puntos de despliegue temporal de efectivos ucranianos y mercenarios extranjeros en 149 zonas.
En su comunicación, el Ministerio de Defensa enfatizó que “todas las instalaciones designadas fueron destruidas“, y entre ellas incluyó la planta industrial Kiev-67 (suburbio oeste de la ciudad) y la base logística del Grupo STS (suburbio sur). “Ninguna otra instalación en Kiev fue atacada”, agregó la cartera.
Fotos: Telegram
A través de Telegram, la primera ministra ucraniana Yulia Svyrydenko confirmó que los ataques de Rusia impactaron en instalaciones del complejo militar-industrial en Kiev, Krivói Rog, Dnipropetrovsk, Kremenchuk y Odesa.
Entre otros objetivos, resultó dañado el puente Kryukovsky (sobre el río Dniéper), importante centro logístico de las FF.AA. ucranianas en Kremenchuk, región de Poltava (centro), que fue utilizado durante la última semana por hasta 18 trenes con carga militar.
Durante la última jornada, la defensa antiaérea de Rusia derribó tres bombas aéreas guiadas, tres proyectiles del sistema Himars (de fabricación estadounidense), así como 210 drones.
Autoridades rusas han subrayado que estos ataques de precisión se producen en respuesta a los bombardeos de Ucrania contra objetivos civiles, que se han triplicado, de acuerdo con denuncias de funcionarios rusos, para impedir progresos en el acercamiento con la Administración Trump.
Insisten además en que los golpes de las FF.AA. de Moscú van dirigidos exclusivamente contra ubicaciones de personal, equipos y mercenarios de las tropas de Ucrania, así como contra infraestructura: instalaciones energéticas, industria de defensa, mando militar y comunicaciones.
