El Sindicato de Petróleo, Gas Privado y Energías Renovables (SIPGER) realizó una asamblea de delegados de base para analizar la situación de la salida de YPF de los 10 pozos maduros santacruceños para concentrar las inversiones en Vaca Muerta. Más de 1.000 empleados aceptaron retiros voluntarios. El secretario adjunto del gremio, Nallib Rivera, pidió tranquilidad y dijo que no permitirán «aprietes» para que renuncien.
En el medio del fuerte conflicto y preocupación en el rubro petrolero por la salida de YPF de Santa Cruz, el secretario adjunto del Sindicato de Petróleo, Gas Privado y Energías Renovables (SIPGER), Nallib Rivera, envió un mensaje de “tranquilidad” a los trabajadores.
Mientras tanto, más de 1.000 empleados aceptaron el acuerdo de retiro voluntario con un pago del 120% de la indemnización, tal como adelantó La Opinión Austral, pero aún quedan trabajadores que no llegaron a un acuerdo o que denuncian irregularidades en la liquidación de sus haberes.
Además, muchos otros obreros sostienen que YPF los está obligando a desvincularse cuando su deseo es continuar trabajando.
A todo esto, Rivera contó que “hablé por teléfono con nuestro secretario general Rafael Güenchenen” y aseguró que el máximo referente de los petroleros “quiere hacerles llegar tranquilidad, y decirles que este sindicato va a pelear por todos los puestos de trabajo”.
También, sostuvo que medios “difunden mensajes equivocados y de miedo, para la familia petrolera”, pero que “acá hay un sindicato presente, más fuerte que nunca”.
En ese sentido, anticipó la convocatoria a una asamblea de delegados de las distintas empresas petroleras “de manera urgente” en Pico Truncado que se realizó el miércoles en donde ratificó que evitarán “cualquier tipo de presiones”, mensaje que pidió transmitir a los trabajadores de base.
“Tenemos un secretario general a la altura de las circunstancias y vamos a dar pelea por cada trabajador”, volvió a enfatizar Rivera.