Con el comienzo de 2025, más obras creativas han pasado al dominio público en los Estados Unidos, permitiendo que miles de creaciones de 1929, incluidas las primeras versiones de Popeye y Tintín, sean reutilizadas, adaptadas y compartidas sin restricciones de derechos de autor.
Popeye, el famoso marinero de EC Segar, fue presentado por primera vez en la tira cómica Thimble Theatre con una historia titulada “Gobs of Work”. En sus primeras apariciones, el personaje no comía espinacas para ganar fuerza, un rasgo que se introdujo en 1932. A partir de ahora, todo lo relacionado con este Popeye, desde sus frases hasta su personalidad y características, es de dominio público, lo que permite a creadores y empresas utilizarlo de manera libre. Sin embargo, en cuanto a la relación con las espinacas, se recomienda esperar para no incurrir en problemas legales.
En el caso de Tintín, el joven reportero y su fiel perro Milú, ambos personajes de las célebres Aventuras de Tintín creadas por Hergé, también han ingresado al dominio público, aunque esta novedad solo aplica en los EE. UU.
Los ciudadanos de la Unión Europea deberán esperar hasta 2054, ya que las leyes de derechos de autor en la región otorgan 70 años de protección post mortem, y Hergé falleció en 1983.
La liberación de estas obras de la protección de derechos de autor abre la puerta a la creación de nuevos proyectos basados en ellos, desde juegos hasta películas, como ya ocurrió con Mickey Mouse, quien también pasó al dominio público el año pasado.
En 2025, se espera ver nuevas adaptaciones y exploraciones de personajes como Popeye y Tintín, con plataformas como Netflix ya preparando su adaptación de la novela The Seven Dials de Agatha Christie.
La lista de personajes clásicos que pasan al dominio público sigue creciendo. En 2026, se sumarán Betty Boop y Pluto, lo que promete traer aún más creatividad a la industria.