Por Gustavo Argañaraz: Las universidades públicas de Santa Cruz y del resto del país aguardan las definiciones del Congreso sobre el financiamiento. Sebastián Puig (decano UTN Santa Cruz) y Karina Franciscovic (decana UNPA- UARG) relataron a La Opinión Austral la actualidad de las casas de altos estudios.
El Senado de la Nación de encuentra próximo a tratar el proyecto de ley del financiamiento universitario. En la previa, la Oficina de Presupuesto del Congreso evaluó el impacto fiscal que tendría la medida para este año y estimó un 0,14% del PBI, equivalente a $738.595 millones.
La iniciativa que se aprobó en la Cámara de Diputados por 143 votos positivos, 77 negativos y 1 abstención el pasado 15 de agosto propone actualizar los créditos presupuestarios destinados a cubrir los gastos de funcionamiento de las casas de altos estudio al inicio del ejercicio 2024 por la variación anual del IPC en 2023, y luego, bimestralmente ajustar el monto resultante por el IPC informado por el INDEC, descontando los aumentos ya otorgados en lo que va del año. Además, establece una recomposición de los salarios del personal docente y no docente desde el 1ro. de diciembre de 2023 y hasta que se sancione el proyecto como ley, tomando en cuenta aumentos ya otorgados, y luego una actualización mensual por la inflación informada por el INDEC.
Santa Cruz
La decana de la UNPA -UARG, Karina Franciscovic, dijo a La Opinión Austral que dialogó con diputados y senadores de diferentes provincias. “El proyecto que se está tratando podría dar respuestas a las necesidades actuales pero veo con dificultad que no sea vetado“, “se necesita una amplia mayoría para que se convierta en un norma y esto nos pone en un escenario complejo“.
Aseguró que “no se puede dar cobertura de cátedras históricas sin presupuesto específico, ni siquiera se están planteando mejoras, sin que hoy no podemos completar lo mínimo en el plano académico de lo que fue el 2023″, señaló.
Advirtió que en la actualidad las universidades tienen un presupuesto prorrogado, al tiempo que no hay créditos presupuestarios, mientras que las resoluciones salen mensualmente y “son específicas para gastos corrientes y no para gastos de funcionamiento, vuelve la situación más compleja en la gestión y genera que trabajemos en problemas que deberían estar resueltos en un esquema de país que se supone que quiere que las universidades sigan trabajando para el desarrollo de la ciencia y tecnología”.
Más adelante, marcó que hay preocupación en la ciudadanía y tomó consciencia que puede afectar el rol de las universidades, los “legisladores deben estar a la altura de las circunstancias, caso contrario habrá un nivel de tensión muy complejo“. “Por encima del 90% del presupuesto se va en pago de salarios, no hay recursos para generar mejora tecnológica, mejora en equipamiento, infraestructura o becas“, precisó.
El decano de la UTN- Santa Cruz, Sebastián Puig, observó en declaraciones a La Opinión Austral que se encuentran “como toda universidad pública con grandes dificultades para pagar los servicios y ni hablar de la ciencia y tecnología que está paralizada en lo absoluto”.
“Aguardamos que se acomode el financiamiento hasta conocer qué sucederá con la ley de leyes (Presupuesto Nacional) este año”, “estamos expectantes de lo que sucederá en el Congreso, mientras estamos en alerta”.
En este escenario, la UTN Santa Cruz “continúa dictando clases, cuidamos los recursos que tenemos en la actualidad, pero no hay innovaciones tecnológicas que debería aportar la universidad pública”, detalló a LOA.
Marcó que hoy esa casa de estudios debería “montar un laboratorio pero no hay horizonte cierto para el desarrollo de la infraestructura a pesar que tenemos mucho equipamiento. Buscamos mejorar no sólo lo que aprenden los profesionales, sino en hacer ensayos como por ejemplo en la industria petrolera”, “el recurso humano es el que cuidará la cuestión ambiental y la correcta administración, surgen de nuestra región y priorizarán el bien de nuestra comunidad”.
Fuente: La Opinión Austral