Segùn consigna el Diario Crònica en su ediciòn de hoy. Todo un barrio de Puerto Deseado carece de gas desde hace una dècada.
Puerto Deseado, (C).- Luego de responder a los censistas, vecinos del Barrio Santos se manifestaron por los 10 años sin gas, se quejaron por las promesas incumplidas de los funcionarios y mostraron las sumas desorbitantes que pagan por electricidad para calecfaccionarse.
Desde hace días el frío polar que castiga la región muestra una dramática postal que los funcionarios se niegan a registrar y es la falta de servicios básicos que sufre un gran porcentaje de la población de la ciudad portuaria, con barrios enteros sin gas, cloacas, pavimento y alumbrado público.
El miércoles tras responder las preguntas de los censistas, decenas de vecinos del populoso Barrio Santos salieron a la calle con carteles para visibilizar la grave situación que atraviesan ante la falta de gas, una promesa incumplida que, según explicaron, lleva 10 años.
“Hace 10 años que estos políticos nos están tomando el pelo. Fuimos construyendo de a poco cada familia con la ilusión de tener el gas, pero ya se cumplió una década y seguimos en la misma, y los chicos son los que se llevan la peor parte” señaló Miguel Ángel, uno de los pioneros del barrio
El vecino apuntó contra el actual diputado nacional Gustavo “Kaky” Gonzáles, al señalar que el funcionario “ahora se quiere hacer el desentendido de la situación siendo que él fue intendente durante 8 años”, recalcó.
Y en ese contexto reveló que la actual intendenta Mónica Vilas “se negó a recibir a un grupo vecinas que fueron a pedirle respuestas; y en su lugar mandó a un cuatro de copas que les faltó el respeto a las vecinas”, aseguró molesto.
“Fue algo muy feo porque fuimos a hablar con la intendenta y el que nos recibió fue un funcionario que se puso a hacer chistes; durante la reunión una vecina le preguntó cuando íbamos a tener el gas, y este hombre le contestó que nunca”, detalló Alicia una vecina del barrio. Y reveló: «a mí también me faltó el respeto; le consulté quien nos podía dar una respuesta, me contestó con evasivas, hasta me salió diciendo que si quería una solución que me tome un vuelo a Buenos Aires. Una falta de respeto total”, consideró.
En diálogo con Crónica una vecina que pidió anonimato por trabajar en un plan en la municipalidad, contó que cuando se hace de noche y se acuestan ella apaga los caloventores eléctricos por miedo a un corto circuito por sobrecarga, sus hijos que son pequeños lloran de frío. “Duermen bien tapados pero la humedad les hace doler los huesos y ellos lloran. Trato de consolarlos y decirles que sueñen cosas lindas, pero es muy triste vivir así. Yo que estoy ahí veo la hipocresía y puedo asegurar que a los políticos de Deseado no les importa la gente; mientras ellos estén calentitos el resto que se joda”, apuntó.
Sin respuestas y devastados por la falta de gas, algunos vecinos propusieron celebrar estos 10 años de promesas incumplidas con grandes carteles. “Queremos que al menos estos carteles se difundan y a estos políticos les de vergüenza, pero son tan cara rotas que ni vergüenza tienen”, apuntaron.
Al tomar conocimiento de la situación el diputado nacional Gustavo Gonzáles posteó en las redes sociales que se hallaba como siempre trabajando para mejorar la calidad de vida de los habitantes del barrio Santos; pero la respuesta de los vecinos fue letal, lo trataron de “delincuente” y “mentiroso”.
Fuente: Diario Crònica