El intendente de San Miguel de Tucumán, Germán Alfaro, confirmó las sospechas que habían circulado durante toda la campaña y renunció a la banca de senador nacional, incluso antes de que se oficialice el resultado de la elección del domingo pasado.
El dirigente del PRO tucumano lo hizo denunciando «un pacto espurio» entre Juan Manzur y Ricardo Bussi para robarle el municipio en caso de asumir su banca en la Cámara alta. En su lugar asumirá su esposa, la actual diputada Beatriz Ávila, que fue segunda en la lista. Desde que lanzó su candidatura, el peronismo de Tucumán dijo que era «testimonial», que de ninguna manera iba a renunciar a la intendencia, que maneja uno de los presupuestos más grandes de la provincia.
Alfaro encontró un atajo para justificar su decición. La anunció luego de que el Concejo Deliberante de la capital provincial ratificara como su presidente al peronista Fernando Juri, un dirigente del riñon de Manzur.
La buena noticia es que ha quedado en claro que Bussi trabaja para que Manzur siga en el poder. Bussi es el más leal de los manzuristas que queda en Tucumán.
Aunque Juri ya era el presidente del Concejo, el alfarismo reclamó un gesto político a la oposición para que ese lugar le quedara a un dirigente del oficialismo y que la intendencia quede en manos del oficialismo en caso de renuncia de Alfaro.
Pero el peronismo se mantuvo firme y tuvo el respaldo del bloque que lidera el derechista Bussi, que tiene un feroz enfrentamiento con Alfaro. En una sesión más que caldeada, los concejales de Juntos por el Cambio denunciaron un golpe institucional. «El señor intendente ha sido elegido como senador, él prometió que iba a asumir y espero que respete la voluntad popular, porque la voluntad popular le dijo que lo quiere como senador», desafió Juri.
Poco después de terminada la sesión, Alfaro confirmó su decisión de no asumir en el Senado para retener la intendencia. «Bussi quiere darle al manzurismo, mediante un arreglo trasnochado, la intendencia que los manzuristas no pueden conseguir a través de los votos», denunció.
Juri no se la dejó pasar: «Me hace gracia la mentira tan descarnada. Lo veníamos anunciando, era una crónica de una muerta anunciada. Hoy está ratificando que era una candidatura testimonial. Siempre busca la culpa en otro para no hacer lo que tiene que hacer. Ahora, la culpa es mía».
Me hace gracia la mentira tan descarnada. Lo veníamos anunciando, era una crónica de una muerta anunciada. Hoy está ratificando que era una candidatura testimonial. Siempre busca la culpa en otro para no hacer lo que tiene que hacer. Ahora, la culpa es mía.
«La intendencia seguirá en manos de Juntos por el Cambio, como los tucumanos quieren, y la banca del Senado quedará en Juntos por el Cambio, tal y como el pueblo votó», agregó Alfaro en diálogo con el diario La Gaceta.
«La buena noticia es que ha quedado en claro que Bussi trabaja para que Manzur siga en el poder», dijo Alfaro, la razón por la que el hijo del ex represor rechaza un acuerdo con Juntos por el Cambio. «Bussi es el más leal de los manzuristas que queda en Tucumán», ironizó.